La importancia de las tarjetas corporativas personales
¡Buenas! Hoy os queremos contaros algo de lo que hacemos en el estudio. Aunque no todo el mundo le da la importancia que debiera, es un error subestimar su potencial. Estamos hablando de las tarjetas corporativas personales.
Lo que a simple vista parece solo un pedazo de papel, es en realidad una de las herramientas comunicativas más poderosas, ya que se convierte en una primera impresión para aquellos a los que se la entegramos. Deben entenderse que una tarjeta de negocios no es simplemente el nombre, sino la entidad corporativa. Por ello, es importante invertir en reflejar lo más fielmente la esencia de la empresa en pocos centímetros de papel.
- Qué debe tener una buena tarjeta corporativa personal
En primer lugar debe recoger la información personal, pero únicamente los datos más relevantes como el nombre, la empresa y el puesto, así como formas de contacto (email, teléfono y página web) y redes sociales en las que la empresa esté presente.
Otro aspecto a tener en cuenta es el diseño que presente, y aquí es dónde entramos nosotros:
No se trata solo de que sea un diseño «bonito», si no de que refleje la identidad de la empresa. Los colores que elijamos, las diferentes formas y texturas estarán dando un mensaje concreto a quién recibe la tarjeta.
Y a ti, ¿como te gustaría que fuese tu tarjeta?